¿La altura de tu encimera te está matando la espalda? Guía fácil para dar con la medida perfecta

Si estás pensando en reformar tu cocina o simplemente quieres darle un aire nuevo, seguro que te has preguntado cuál es la altura ideal para la encimera. Parece una tontería, pero acertar con este detalle es importantísimo para que cocinar no se convierta en una tortura diaria. Confía en nosotros: sabemos de lo que hablamos.

¿Por qué darle tanta importancia a la altura de la encimera?

Imagínatelo así: cada vez que cocinas, pasas un buen rato de pie frente a la encimera. Si está demasiado baja, te obligas a encorvarte; si está demasiado alta, acabas con los hombros tensos y doloridos. Un desastre.

La altura correcta de la encimera es clave para que puedas cocinar cómodamente, sin forzar la postura y disfrutando del proceso. Se trata de encontrar ese punto mágico en el que te sientes a gusto y puedes preparar tus platos favoritos sin acabar molido al final del día.

¿Vale la altura estándar para todo el mundo?

Por lo general, las encimeras se instalan a una altura de entre 90 y 92 cm. Esta medida funciona como un comodín para la mayoría de las personas. Pero claro, no todos medimos lo mismo, ni cocinamos igual, ni tenemos las mismas necesidades. Así que no, no siempre es la mejor opción.

¿Cómo calcular la altura de la encimera ideal para ti?

La forma más sencilla es personalizar la altura según tu estatura. Una regla rápida es dividir tu altura entre dos y añadir 5 cm. Si mides 1,70 m: 170 / 2 + 5 = 90 cm aprox.

Guía rápida según estatura:

La altura de trabajo perfecta se alcanza cuando el plano de la encimera queda aproximadamente 10 a 15 cm por debajo de tus codos flexionados. Esto permite que el antebrazo se apoye naturalmente para realizar tareas como cortar o amasar sin necesidad de subir los hombros.

Aquí te dejamos una guía práctica para determinar la altura encimeras que mejor se adaptará a tu cuerpo y a tu forma de cocinar:

• Personas más bajas de 1,60 m: Tu altura encimeras ideal oscila entre 85 y 90 cm. Si la encimera supera esta medida, tendrás que levantar los hombros constantemente para trabajar, lo que se traduce en tensión cervical y fatiga rápida. Una altura más baja te permite trabajar con una postura más relajada.
• Estatura media (1,60 m – 1,75 m): La medida estándar, que va de 90 a 92 cm, suele ser la más cómoda. Esta medida universal está pensada precisamente para este rango. Te permite tener una ligera flexión de codos, el punto óptimo para la mayoría de las tareas de preparación y manipulación de alimentos.
• Personas más altas de 1,75 m: Necesitarás una altura encimeras superior, generalmente entre 92 y 95 cm. Una encimera por debajo de los 92 cm te obligará a curvar la espalda cada vez que piques verduras o laves utensilios, forzando la zona lumbar. Asegúrate de que el diseñador no se quede en la medida genérica.

El Test Definitivo: Lo más importante es que hagas la prueba: colócate frente a la altura que tienes en mente. ¿Puedes trabajar con los antebrazos apoyados de forma natural, sin subir los hombros ni doblar la espalda? Si la respuesta es sí, has encontrado tu medida. Haz la prueba y verás la diferencia en tu comodidad diaria.

Cocinas a diferentes alturas: lo último en comodidad

Si buscas un plus de ergonomía y diseño, una tendencia en auge es crear varias zonas de trabajo a diferentes alturas. Tiene muchísimo sentido:

Zona de cocción → un poco más baja para mover ollas con comodidad
Zona de preparación → algo más alta para cortar y manipular alimentos con precisión
Zona de barra/desayuno → más alta para sentarte o tomar algo rápido

Así, cada actividad tiene su espacio perfecto y tu cocina moderna funciona mucho mejor.

Factores que influyen en la altura final de la encimera

No se trata solo de elegir un número. La estructura de tu cocina marcará la medida final.

1. Altura del mueble base: suelen medir entre 70 y 80 cm.
2. Zócalo o patas: añaden entre 10 y 15 cm.
3. Grosor de la encimera: varía bastante según el material:
   • Laminadas: 1,8 – 3 cm
   • Cuarzo: 2 – 3 cm
   • Porcelánico / Dekton: 0,8 – 2 cm
4. Electrodomésticos integrados: especialmente el lavavajillas. Si no se calcula bien, podrías tener problemas para instalarlo.

Errores típicos que deberías evitar

• Elegir la altura porque “es la que todo el mundo pone”
• No tener en cuenta la altura de la persona que más cocina
• Olvidar incluir el grosor de la encimera al calcular
• No considerar los electrodomésticos integrables
• Copiar la altura de otra cocina que no está hecha para ti
• Pensar solo en estética y no en comodidad

En resumen: ¿cuál es la altura de encimera perfecta?

La búsqueda de la altura encimeras ideal es una combinación de ciencia, ergonomía y personalización. No existe una medida mágica universal, sino una medida mágica para ti.

La altura ideal es la que cumple estos cinco puntos esenciales:

Te hace la vida más cómoda cada día: Una cocina bien diseñada aumenta la eficiencia y el placer de cocinar. Al final, la altura de la encimera es un componente clave de una cocina ergonómica que funciona para ti.

Se adapta a tu estatura: Es el factor primordial. Debe situarse aproximadamente 10-15 cm por debajo de la altura de tus codos flexionados para garantizar que la columna vertebral se mantenga recta durante la preparación.

Te permite cocinar sin encorvarte ni forzar hombros: Una buena altura encimeras evita la sobrecarga muscular. Si sientes tensión después de 15 minutos cortando, la altura es incorrecta. La comodidad debe ser prioritaria sobre cualquier moda.

Funciona con tus muebles y electrodomésticos: Hay que tener en cuenta la altura del zócalo, el grosor del material elegido (porcelánico, cuarzo, etc.) y la integración de electrodomésticos como el lavavajillas o el horno. ¡El cálculo debe ser milimétrico!

Considera a todos los usuarios: Si varias personas cocinan regularmente en casa y sus estaturas son muy diferentes, deberás priorizar la altura de la persona que más tiempo pasa en la cocina, o, mejor aún, considerar las zonas de trabajo a diferentes alturas.

En Gelse Cocinas diseñamos espacios totalmente a medida, pensando en la ergonomía, la estética y en cómo usas tu cocina en tu día a día. Porque una cocina bonita está muy bien, pero una cocina cómoda… es otra liga.

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