Extracción de humos en cocinas domésticas.

Durante el proceso de extracción de humos en cocinas domésticas, los humos de la cocina que se aspiran (el vapor) se descargan al exterior a través de un sistema de conductos de aire de escape junto con los olores y la humedad. Para instalar este tipo de sistema de ventilación, se debe hacer un agujero en la pared de la casa. También es necesario introducir aire nuevo y fresco en la cocina y en la sala de estar para reemplazar el aire que se ha eliminado, de modo que no se cree una presión negativa excesiva.

En un sistema de recirculación de aire, el aire extraído es conducido a través de varios filtros, despojado de grasa y olores y luego alimentado de nuevo a la cocina combinada con la sala de estar. Este diseño, sin embargo, no elimina la humedad generada durante la cocción. Por lo tanto, al elegir este sistema de ventilación de este tipo, siempre debe haber una manera de proporcionar una ventilación adicional. Por ejemplo, a través de una puerta de balcón o una ventana cerca de la placa de cocción.

Aunque la mayoría de los sistemas de extracción de humos en cocinas domésticas están diseñados para extraer el aire al exterior o recircularlo, también existen modelos híbridos que permiten cambiar el funcionamiento entre la recirculación y la extracción (junto con un sistema de conductos de aire y una caja mural correspondientes). De esta manera se pueden aprovechar las ventajas de ambos modos de funcionamiento y, por ejemplo, se puede proporcionar ventilación mediante el modo de recirculación en invierno, de modo que el aire interior limpio y cálido permanezca en la cocina-sala de estar. En verano o durante los procesos de cocción que producen fuertes olores, es posible entonces pasar al modo de extracción.

Contra las leyes de la física: extracción de humos en cocinas domésticas hacia abajo

Varios factores determinan la eficiencia